
Cuando se trata de experiencias inolvidables, conducir un coche de lujo está seguramente entre los puestos más altos. La sensación de la velocidad y el poder de un motor diseñado específicamente para hacer correr la adrenalina por nuestras venas es definitivamente algo que no se puede describir, ¡hay que vivirlo!
Conducir un coche de lujo, sentir el rugido del motor, apreciar los detalles y la calidad de la manufactura, solía ser un sueño que pocos podían alcanzar. Aunque ser dueño de una de estas bestias de la carretera sigue al alcance de pocos, hoy en día la increíble experiencia de conducir una de ellas es posible. Basta con encontrar el lugar correcto.
Conducir un Ferrari
Sin lugar a dudas, son muchas las opciones que tenemos a disposición para sentir lo que siente un piloto profesional al deslizarse por la pista. Cada uno de nosotros seguro tiene sus preferencias particulares, ya sea que nos apasiona la velocidad, la delicadeza de los acabados de lujo del interior de uno de estos coches o la tecnología que sólo encontramos en una de estas maravillas, pero todo ello y más, lo podemos encontrar en uno los fabricantes más famosos e importantes de la historia del automovilismo: Ferrari.
Todos y cada uno de los modelos de Ferrari están diseñados y construidos para integrar el lujo y la velocidad de manera perfecta. Y lo mejor es que podemos ponernos al mando de uno de estos coches fácilmente. En Colectivia Ferrari, por ejemplo, podemos encontrar una gran variedad de paquetes con descuentos que nos permitirán descubrir lo que se siente conducir uno de estos maravillosos automóviles. Lo mejor de todo es que los paquetes también incluyen la oportunidad de recibir instrucciones de un monitor profesional, mientras aceleramos al máximo en un circuito real y, por supuesto, no pueden faltar las fotos para recordar tal experiencia.
La experiencia de conducir un Ferrari
Uno de los rasgos característicos de Ferrari es el sonido particular de sus motores, un rugido poderoso pero que a su vez representa el diseño, la calidad y la tecnología de un coche construido con el cuidado de cada detalle. No se trata sólo de la velocidad, sino de la sensación de estar al mando de un coche que ha sido pensado para brindar el mayor rendimiento a nivel profesional. Estar frente al volante de un Ferrari puede ser una experiencia intimidante al inicio, pues los controles incorporados en el volante y la variedad de indicadores del tablero dan la impresión de estar en algo más que un simple coche; y sí, en efecto es así. Ferrari no solo cuida de cada aspecto técnico, sino que da el control total al conductor.
Conducir un Ferrari es una experiencia incomparable y cada detalle está pensado para transmitir esto al conductor. No sólo la popular insignia del caballo al frente del coche es un homenaje a la historia de Ferrari, también lo es la excepcional pintura roja que los caracteriza, así como la delicadeza de la tapicería.
Sin duda, Ferrari hace honor a su historia de la mejor forma posible: cada uno de sus coches es garantía de una experiencia de conducción inigualable.
Regala la experiencia de conducir un Ferrari
Experimentar lo que se siente conducir uno de estos coches es algo que tendremos que repetir y, mejor aún, ¿por qué no compartirlo con nuestros amigos y familiares? La oportunidad de conducir un Ferrari es un excelente regalo para cualquiera que disfrute de grandes emociones.
Los paquetes que ofrecen la posibilidad de estar al volante de estas maravillas incluyen pases para nuestros amigos o familiares, de modo que se trata de una experiencia que podemos compartir con quien queramos. ¿Qué mejor regalo que la experiencia de conducir un Ferrari en un circuito profesional? Y mejor es que podremos estar allí en el momento en que se encienda el motor y la adrenalina empiece a correr.